martes, 2 de agosto de 2011

El hombre absurdo, o El Extranjero

...de Camus, una obra es donde destaca un tipo de personaje, un protagonista que es al mismo tiempo el narrador de la obra, que es completamente opuesto a los personajes apasionados de otros tipos de novela, como las novelas del Romanticismo, los personajes desafortunados del naturalismo francés, las víctimas del destino de la tragedia griega, o los enamorados apasionados del realismo fantástico americano. Por supuesto, la obra de Camus no es cualquier "otro tipo" de obra. Es un tipo de literatura que nació frente al caos histórico que representa el siglo XX, y más en Europa, donde las guerras mundiales, además de devastar físicamente el territorio, lo hicieron moralmente durante más tiempo.
Este personaje es, esencialmente, indiferente. Ve cómo pasa la vida frente a él, a veces es buena, a veces no, pero finalmente el tiempo sigue caminando y este personaje simplemente lo pasa de la mejor manera que se le presenta. Es decir, si para pasar el tiempo durante el domingo queda de verse con una chica y hace el amor con ella, pues esto ocurre y ya. Trabaja mucho en algo rutinario, que en realidad es poco motivador y sí muy burocrático.
Pero para él no hay razón, aparente, para molestarse. O sí podría haberla, pero socialmente no es posible estallar en un "berrinche" o en ira cada vez que algo no es o no sale como lo deseamos. Este tipo de conducta, que es o podría ser típica de un adolescente, no es para nada aceptable en un adulto.
Y entonces, las personas aprenden a navegar por la vida ateniendo a convenciones sociales que solicitan, o más bien, exigen abandonar todo apasionamiento innecesario o que pueda incomodar a otros. Poco a poco el espíritu se doblega y la persona se queda quieta, incluso frente a situaciones en las que, hasta por convención social, sí debería reaccionar con cierto ímpetu o violencia. Así, el protagonista asiste al funeral y al entierro de su madre sin lágrimas ni estremecimientos. Pero claro, esta tampoco es una conducta aceptable. Así que, a menos de que el individuo se deje absorber completamente por la sociedad y la absorba él también a ella, no basta con tratar de acomodarse, pues si se hace de esta manera, el espíritu se adormece y se queda indiferente.
Para los existencialistas, la libertad de elección es un tema muy importante. Incluso, el no decidirse por nada es ya una elección por sí misma. Mersault utiliza esta libertad de no elección y lo hace patente en varias ocasiones, por ejemplo, cuando María le pide que se case con ella, él simplemente acepta porque es evidentemente más fácil no elegir por sì mismo que tener que hacerlo. O quizá no es más fácil, pues esta elecciòn implica ya por sì misma cierto compromiso y responsabilidad, pues es ineludible tener que elegir.

Pero no es solamente la indiferencia del personaje la que llama la atención. También lo es lo absurdo de varias situaciones que pasan a su alrededor. Son más absurdas cuanto más son actudes generalizadas en la sociedad. Por ejemplo, la amante del protagonista le propone casarse con él después de pocas salidas, en una búsqueda de entrar a la convención sociocultural del matrimonio. La misma circunstancia en la que se da el asesinato es un tanto ridícula, pues es el resultado de una pelea por imponerse como el más dominante, a costa de una mujer. El hermano de la mujer golpeada busca vengarse, pero el golpeador alega haber sido engañado. ¿Quién en realidad se preocupa realmente de su relación con la mujer, sea como hermano, o como amante?
Así, haber disparado más de una vez no es lo preocupante. Lo malo es que hubo una pausa entre el primer disparo y los demás. Eso parece ser alevoso. Y peor todavía, es absurdo que el argumento que condena al asesino sea que no lloró en el funeral de su madre.
Así, indiferente frente al cansancio de la vida, ajeno a los problemas que parecieran ocurrir desde una bruma lejana, y molesto frente al intento de reanimación sociocultural del sacerdote, el personaje principal de la obra de Camus es, por eso, un extranjero de sí mismo y del entorno que le rodea.